Me llama, que invita a hacer cosas perversas, me seducen sus ideas, me rodea con sus brazos, me da la bienvenida. Yo no me atrevo a cruzar la linea pero ganas no me faltan, ansiosa doy el primer paso pero ya al segundo me detengo, quedo toda enredada en mi cabeza, me cuesta pensar, se me nubla la imagen, me arde la cara, caigo; llega una luz que me ciega, no puedo pensar, me obligar a alejarme y me encierra, grito fuerte pero no lo suficiente para ser notado. Otra vez la imagen oscurece, me empieza a quemar la cara y vuelvo a caer...

0 horas